Este proceso, al que no solo el regimen de Ucrania sino parte importante de las naciones que condenan la invasión rusa a esta nación rechaza, se prolongará hasta el próximo 27 de septiembre.
En un informado, el regimen ruso, por medio de la patrona del organismo electoral de Rusia, aseguró que dará todo la ayuda primordial a los pobladores de las zonas «liberadas» para que logren participar en este proceso.
«Todos los miembros de los comisiones electorales, bastante más de 5.000 personas, iniciaron su tarea», manifestó a la agencia Interfax la patrona de la comisión electoral instalada en la zona de Zaporiyia, Galina Katiuschenko.
Katiuschenko describió que por medidas de estabilidad a lo largo de los primeros 4 días de votación los habitantes de dichos países podrían votar a partir de sus viviendas o en sitios especiales y que solo el propio 27 de septiembre van a ser abiertos los colegios electorales usuales.
Pese a que Rusia ha respaldado los referendos, según los profesionales militares su batallón ocupa poco bastante más de la mitad de las zonas de Donetsk y Zaporiyia.
Aunque sí controla plenamente las regiones de Lugansk y Jersón.
Por su lado, el regimen de Ucrania, que rechaza con vehemencia la ejecución de dichos referendos, acusa a las fuerzas rusas de manipular a los electores en los países ocupados.
Estas votaciones además fueron duramente críticadas por diversos dirigentes en Occidente.
El mandatario de EE.UU., Joe Biden, calificó a lo largo de su discurso en la Asamblea Gral. de las naciones unidas de «erróneos» los referendos y acusó a Rusia de «querer terminar con el derecho de Ucrania a existir como Estado».
¿Cuál es el propósito de los referendos?
Desde el inicio de la invasión, el pasado febrero, el fin de Moscú fue apropiarse primordialmente de los países localizados en la zona del Donbás, en el este de Ucrania.
Por cierto, ahí concentró su táctica militar una vez desistió de intentar capturar Kyiv, la ciudad más importante de la nación.
No obstante, en las últimas semanas la contraofensiva del batallón ucraniano ha logrado recapturar alrededor de 3.000 kilómetros de territorio y liberar numerosas metrópolis que estaban bajo el control ruso, lo cual ha hecho que Moscú cambie de planes.
Primero, convocó a 300.000 reservistas para reforzar su empeño militar en Ucrania.
Y segundo, confirmó la ayuda a la festividad de los referendos que buscan integrar dichos países a Rusia, con un objetivo primordial: poder asegurar que su territorio está siendo atacado por armas de la Organización del Tratado del Atlántico Norte y otros territorios de Occidente.
A esto se suma que, con los 300.000 nuevos militares que ha convocado, Rusia podría examinar y defender alrededor de 1.000 kilómetros de frontera.
Esta táctica ya ha sido usada por Moscú en 2014, una vez que consiguió agregar Crimea Luego de una secuencia de incursiones militares y más adelante hizo un referendo, que no ha sido aceptado por diversos territorios en torno al mundo.
Las últimas actividades ordenadas por Vladimir Putin fueron extensamente rechazadas por representantes de gobiernos de Occidente, como el mandatario Biden y la presidenta de la Comisión de la Alianza Europea, Ursula von der Leyen.
¿Algo cambiará?
No obstante, a pesar del deseo ruso, lo cierto es que por lo menos 2 de las metrópolis donde empezaron los referendos no son regiones dominadas enteramente por la milicia ruso.
Estas metrópolis son Jersón y Zaporiyia, donde las fuerzas de Moscú aún no han podido dispersar la contraofensiva del batallón ucraniano.
Por eso mismo, en charla con la BBC, un consejero del ministro de Protección de Ucrania, Yuriy Sak, anotó que los referendos estaban condenados al fracaso.
«Estamos viendo que las poblaciones locales permanecen cada una de a favor de volver a Ucrania», indicó.
Sea como sea, Kyiv plantea que cualquier persona sea el resultado de estas votaciones no cambiará su táctica y sus fuerzas seguirán oprimiendo para liberar los países.
Por su lado, el analista ruso Alexander Baunov apunta que, aunque es cierto que redefinir las superficies ocupadas como territorio ruso posiblemente no detendrá al batallón de Ucrania, envía un mensaje a las poblaciones que tiene bajo su control.
Y añade, que «la esperanza del Kremlin es que las naciones de Occidente que secundan a Ucrania se resistan a que sus armas sean disparadas contra países declarados por Moscú como rusos».
De esta forma, cobra sentido la anotación que hizo Putin esta semana sobre «usar todos los medios a su disposición para defender a Rusia».
Esto pone sobre el tapete, como lo sugiere Baunov, la utilización de armas nucleares.
Al final, el secretario de Estado de EE.UU., Antony Blinken, habló de una «escalada peligrosa», empero reafirmó la postura de Washington de que ningún reclamo ruso sobre suelo ucraniano podría quitarle el derecho a Ucrania a defenderse.
Inclusive Turquía, que ha tratado de realizar un papel mediador, ha sentenciado la elección como ilegítima.
