En 2020, en UNICEF, comenzamos un nuevo programa de cooperación con el gobierno de México para el periodo 2020-2025 con la visión de colaborar con los esfuerzos nacionales para promover una nueva generación de niñas, niños y adolescentes quienes, a través de una atención integral recibida desde la infancia, no enfrenten ninguna carencia o limitación y puedan crecer saludables, educados, libres de pobreza y estén protegidos contra la violencia y que, además, tengan igualdad de acceso a oportunidades y estén empoderados para impulsar un cambio y desarrollo positivo en la sociedad.
El primer año del nuevo programa de cooperación se vio marcado por la pandemia de COVID-19, una situación que confirmó nuestro compromiso por seguir trabajando para la niñez y la adolescencia; por lo cual, en 2020, redoblamos esfuerzos para continuar con nuestro programa regular de trabajo y atender simultáneamente esta emergencia sanitaria.
La pandemia afectó a la niñez en diversos aspectos de sus vidas limitando su desarrollo integral: sus escuelas cerraron y las opciones para continuar con sus estudios a distancia dependieron de los recursos tecnológicos que tenían en casa; su acceso a alimentos se ha reducido y, por tanto, niñas y niños corrieron el riesgo de pasar hambre; el distanciamiento social y el confinamiento prolongado afectó su salud mental provocando que se sintieran estresados y deprimidos.
Además, la crisis económica redujo los ingresos familiares orillándolos en algunos casos, a dejar sus estudios para trabajar. La pandemia, sin duda, ha puesto en riesgo los logros obtenidos en años anteriores que proveían a la niñez un futuro próspero; por lo cual, ahora estamos ante una generación que adolece cada momento que pasa y ve afectado negativamente su desarrollo.