Expertos de diversas instituciones de la Secretaría de Salud desarrollan un protocolo de investigación sobre el uso de plasma convaleciente para tratar pacientes graves con COVID-19, debido a que, hasta el momento, no existe un tratamiento aprobado para esta enfermedad y hay información científica de bajo rigor metodológico que sugiere que podría ayudar a algunos pacientes a recuperarse.
Se ha encontrado que los anticuerpos presentes en el plasma convaleciente son proteínas que pueden ayudar a combatir la infección en pacientes graves; sin embargo, se realizan más acciones de investigación para determinar si podría acortar la duración de la enfermedad, reducir la morbilidad o prevenir la muerte asociada con COVID-19.
El plasma convaleciente es la parte líquida de la sangre que se recolecta de pacientes que se han recuperado de COVID-19, y debe cumplir todos los requisitos de acuerdo con la normatividad nacional.
En el consorcio de investigación participan: Instituto Nacional de Ciencias Médicas y Nutrición “Salvador Zubirán” (INCMNSZ); Instituto Nacional de Cancerología (INCan); Instituto Nacional de Enfermedades Respiratorias (INER); Instituto Nacional de Cardiología; Hospital General “Manuel Gea González”; Hospital de Alta Especialidad del Bajío; Centro Nacional de la Transfusión Sanguínea (CNTS); Hospital “San José” y TecSalud.
Hombres y mujeres de 18 a 65 años pueden donar plasma convaleciente. En caso de ser mujer, deber ser nuligesta (sin historia de embarazo previo). Las personas que deseen donar deberán contar con diagnóstico de COVID-19 confirmado con RT-PCR para SARS-CoV-2, haber permanecido al menos 14 días asintomáticos y, después, tener una prueba de PCR negativa, o haber permanecido 28 días asintomáticos si no se cuenta con esta prueba.