mayo 28, 2024

El gobernador de Florida, Ron DeSantis, y la ex embajadora de EEUU ante la ONU Nikki Haley iniciaron su participación en el tercer debate republicano, que se celebra este miércoles en Miami, con críticas a Donald Trump, de quien aseguraron no es el presidente que EEUU necesita ahora.

 “Donald Trump es un tipo muy diferente al que era en 2016″, expresó DeSantis, en alusión a la primera campaña presidencial del ex mandatario, en su alocución inicial, durante la cual acusó al ex presidente de ser responsable de los malos resultados para los republicanos en la jornada electoral del martes.

“Estoy harto de que los republicanos pierdan”, agregó el gobernador de Florida, segundo en intención de voto entre los votantes de ese partido, quien además lamentó que el ex mandatario no haya participado en ninguno de los tres debates celebrados hasta la fecha en este proceso de primarias.

“Te debe explicar por qué debería tener otra oportunidad”, dijo DeSantis al moderador Lester Holt, de la cadena NBC News.

A su turno, Haley tampoco se guardó críticas al ex jefe de estado, de quien dijo que fue “el presidente correcto en el momento correcto”.

“No creo que sea el presidente adecuado ahora”, indicó Haley, tercera en intención de voto, que además acusó a Trump de aumentar la deuda nacional.

Entretanto, el ex gobernador de Nueva Jersey Chris Christie señaló que Trump tendrá que pasar el próximo año en los tribunales para responder por los cuatro procesos criminales que afronta en vez de enfocar en los problemas del país, mientras que el empresario Vivek Ramaswamy y el senador Tim Scott evitaron ataques directos al ex presidente.

A la hora prevista, las 20:00, hora local, los moderadores, los periodistas de la cadena NBC Lester Holt y Kristen Welker, junto al presentador radial Hugh Hewitt, abrieron el debate que se celebra en el Adrianne Arsht Center, en el centro de Miami y cuyas inmediaciones se hallan bajo fuertes medidas de seguridad desde tempranas horas del día.

El gran protagonista de la jornada es el ex presidente Donald Trump (2017-2021), quien favorecido por la gran distancia que les dan las encuestas respecto a los otros aspirantes, de unos 40 puntos porcentuales, repite la estrategia de los dos debates anteriores y ha optado por celebrar su propio evento de campaña.

Trump, al que los cuatro procesos criminales que afrontan parecen no hacerle mella en su objetivo de volver a la Casa Blanca, encabezará un mitin en el Henry Milander Park, en la ciudad de Hialeah, a unos 12 kilómetros del centro de Miami y donde la inmensa mayoría de su población (95 %) es hispana, sobre todo de origen cubano.

Con aire festivo, los simpatizantes del ex mandatario, con las características indumentarias que incluyen gorros y camisetas con el lema de campaña “Make America Great Again”, se han agolpado a las puertas de este recinto desde tempranas horas, deseosos de coger una buena ubicación.

Las inmediaciones de este espacio en la que es una de las grandes ciudades más hispanas de EEUU también están bajo un gran despliegue de seguridad, ante la previsión de miles de asistentes, algunos de ellos llegados desde otros estados y otros portando carteles con la ficha policial de Trump y el lema “Seguimos adelante”.

A sabiendas de que el foco de la política nacional está hoy en Florida, estado donde hay mas republicanos inscritos que demócratas, el Comité Nacional Demócrata ha dispuesto anuncios publicitarios bilingües (inglés y español), en los condados sureños de Miami-Dade y Broward, además de otros carteles móviles que circularán cerca al Adrianne Arsht Center.

Además de críticas a Trump y a DeSantis, el Partido Demócrata apelará en esos anuncios a la defensa del derecho al aborto, una carta que les sirvió para lograr victorias claves en jornadas electorales celebradas el martes en estados como Virginia y Ohio.

En este último, los votantes decidieron consagrar la interrupción voluntaria del embarazo como un derecho constitucional por medio de un referendo.

El aborto ha sido abanderado como una causa demócrata tras el fallo de la Corte Suprema que retiró la protección federal a este procedimiento en junio de 2022.