mayo 28, 2024

Casi una veintena de chicos y adultos de la secta radical Lev Tahor han escapado de un centro en Chiapas, donde persistían detenidos. El conjunto de fieles estaba bajo protección de las autoridades mexicanas, luego de una redada contra un campamento de la sociedad ultraortodoxa alrededor de la frontera con Guatemala la semana pasada. El Sistema Nacional para el Desarrollo Integral de las Familias (DIF), la organización responsable de las instalaciones, no se ha pronunciado sobre el incidente.

En las imágenes se ve a chicos y chicas, vestidos con los trajes particulares de la secta (trajes oscuros para los hombres y túnicas que cubren de pies a cabeza a las mujeres), salir del centro de atención del DIF en Huixtla, una sociedad chiapaneca a unos 50 kilómetros de la frontera con Guatemala. En los clip de videos se muestra a los menores caminar ligados afuera de las instalaciones, mientras tanto que en otras grabaciones difundidas por la prensa local se ve a ciertos empujar de manera directa a los guardias que estaban en la ingreso y subir a camionetas. Los hechos se produjeron a primera hora de este jueves.

Agentes mexicanos e israelíes lanzaron una operación conjunta la semana pasada contra el conjunto ortodoxo, tras recibir denuncias de viejos miembros de tráfico de individuos, abuso sexual y violencia infantil. En la redada, 2 dirigentes de la sociedad religiosa fueron acusados por orden de un juez mexicano y trasladados a una penitenciaría en Chiapas. Ambos acusados fueron ubicados como Moshe Yosef Rosner, de nacionalidad de Estados Unidos, y Menachen Enden Alter, con pasaporte israelí.

El propósito de la operación, que se planificó a lo largo de casi 2 años, era liberar a las chicas, chicos y adultos del culto, aprehender a los dirigentes y salvar a un infante de 3 años que era buscado por Israel Amir, un antiguo integrante que escapó del conjunto y se le había impedido el contacto con su hijo. En los últimos días, los miembros de la sociedad que persistían en el DIF de Huixtla se amotinaron y agredieron a los custodios. Se quejaban de las condiciones en las que estaban alojados y exigían ser devueltos a sus familias. Otros seguidores acusaban una “persecución religiosa”.

Lev Tahor, cuyo nombre se traduce del hebreo como corazón puro, ha sido fundado en Israel en la década de los ochenta y a partir de entonces arrastra un historial de escándalos y acusaciones por secuestro, trata de individuos, matrimonios obligados y abusos físicos y sexuales. El conjunto fue proclamado “culto peligroso” por las autoridades israelíes y ha enfrentado indagaciones en USA, Canadá, México y Guatemala por el trato que da a sus miembros más adolescentes. La prensa israelí apoda a la organización como los “talibanes judíos” por sus prácticas extremistas, rechazadas por básicamente cada una de las facciones del judaísmo, inclusive las corrientes más ortodoxas.

Fuentes cercanas al operativo advierten de que entre los miembros fugados hay chicos con pasaportes estadounidenses, de Canadá, israelíes y guatemaltecos, un reflejo del peregrinaje del conjunto por el conjunto de naciones americano tras estar en la mira de las autoridades. Además temen que los menores hayan sido llevados de vuelta a Guatemala, donde la mayoría del conjunto radica a partir de 2014, y que el huya haya echado por la borda dos años de idealización para ofrecer el golpe al conjunto. Según los primeros informes, se considera que la secta ha tenido aquel asentamiento en la selva de Chiapas, a unos 20 kilómetros de la urbe fronteriza de Tapachula, ya hace al menos 6 meses.

Las autoridades mexicanas todavía no han aclarado bajo qué situaciones los miembros del conjunto han abandonado el centro. El Instituto Nacional de Migración de México ha señalado que no está involucrado en la administración del asunto y correspondiente al DIF. Por su lado, un portavoz del DIF dijo que está corroborando la información.

Apenas en abril pasado, Nachman Helbrans y Mayer Rosner, ambos mandos más elevados de la organización radical, fueron condenados a 12 años de prisión en USA por el secuestro de 2 chicos, que entonces tenían 14 y 12 años. Los menores raptados eran sobrinos de Helbrans, jefe e hijo del fundador de la secta, y fueron llevados a partir del norte del Estado de Nueva York hasta el área metropolitana de Ciudad de México, donde fueron encontrados por agentes mexicanos y estadounidenses. a partir de entonces, la comunidad, marcada por el hermetismo y el riguroso control sobre sus miembros, está fundamentalmente a salto de mata y fue localizada en casi una decena de territorios en América, Europa del Este y Oriente Próximo.